Gervasio Sánchez, en estado puro


El fotoperiodista, Gervasio Sánchez, presenta exposición en el museo IAACC Pablo Serrano sobre su extensa trayectoria profesional. Sus comienzos en Centroamérica en 1984, le hicieron convertirse con el tiempo en uno de los periodistas españoles que mejor han retratado el horror de la guerra.

La muestra se divide en cinco secciones: “América Latina 1984/1992″, “Balcanes 1991/1999″, “África 1994/2004″, “Vidas minadas 1995/2007″ y “Desaparecidos 1998/2010″, que repasan el extenso trabajo realizado por el fotoperiodista cordobés, afincado en Zaragoza.

En la primera de las áreas de la exposición, el visitante se funde con la realidad latinoamericana. Los retratados, de países como El Salvador, Nicaragua, Guatemala, entre otros países, impactan a quienes observan las fotografías.

La segunda sección, dedicada a los Balcanes, se adentra en la guerra servio-croata y en el sitio de Sarajevo, dos acontecimientos que dejaron ríos de sangre tras de si, familias divididas y pobreza extrema en una sociedad duramente castigada por el conflicto.

La sección contigua está dedicada íntegramente a África y a los países de Ruanda, el Congo, Sudán y Sierra Leona. El visitante se queda impresionado con los retratos de los miles de jovenes que sufrieron y sufren el terror de la hambruna y de los conflictos armados y con los miles de desplazados que, separados de sus familiares, intentan sobrevivir.

Tras las secciones anteriores, la exposición se adentra en una de sus colecciones fotográficas mas emotivas,la dedicada a los niños que sufrieron la barbarie de las minas antipersona y centrada en la evolución de estos jovenes tomando como ejemplos al camboyano Sokheurm Man, al bosnio Adis Smajic y  a la mozambiqueña Sofia Elface Fumo.

En la última sección, la muestra busca poner cara, por medio de sus familias, a los cientos de desaparecidos en los países retratados por Gervasio. La visita a la exposición se hace imprescindible, ya que hace justicia con las víctimas de la guerra y documenta el gran trabajo realizado por el periodista durante este tiempo.

*El reportaje completo se puede leer en Made in Zaragoza


Deja un comentario